Momentos

En casa siempre comenzábamos las celebraciones de Navidad el día de la festividad de la Inmaculada Concepción.

Ese día se ponía el Nacimiento, más tarde llegó el Árbol, se probaba el primer turrón.

Ahora todo va más adelantado y más deprisa. Ya hace tiempo que las luces están encendidas en las ciudades, los turrones, apenas terminado el verano ya llenan los supermercados. Y también parece que la celebración de la Navidad ha perdido su sentido. Se queda reducida a compras y más compras. Si no hay regalos no hay Navidad.

La Navidad es un momento de compartir, en familia, con amigos. Compartir ilusiones, alegrías, a veces también momentos tristes, recordar, con alegría no con pena a quienes ya no están, pero permanecen con nosotros.

Este año todavía no tenemos la casa ambientada, estamos algo cansados, pero no tardaremos muchos en poner las luces y adornos y hoy hemos celebrado el día de la Inmaculada, con cierta austeridad, pero recordando que en nuestras casas daba comienzo a ese periodo alegre y esperanzado que era la Navidad.

Menú para la festividad de la Inmaculada:

A disfrutar.

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