No sé porqué nos empeñamos en vestir colores tristes y apagado en la temporada de otoño-invierno. Bastante desapacibles son ya esos días como para encima darle más oscuridad a la vida.
Me gustan las flores, también en la ropa, así que un vestido alegre siempre viene bien, sea la época del año que sea.
Este vestido es de hace tres temporadas, otoño-invierno 2015/2016, pero sigue animoso.


Deja un comentario